Sed lex dura lex.
Y cuando el corazón nos tiembla procuramos preguntarle al destino un por qué.
Fidelis ad Mortem.
Respetamos la ley de la naturaleza, aunque es más coherente que los viejos sean los primeros en partir, nunca terminamos de aceptar que sean los más jóvenes. Nunca.
Ave atque vale.
El cielo o la Tierra necesita de ángeles que los cubran con su manto, de fe. Que nos muestren una pequeña lección con su fortuita partida.
Ya te queríamos.
Zaybet
Publicar un comentario
Gracias por tu madness.
Tu opinión para mí es lo más importante, con respeto y sin SPAM evitaremos que llegue a la moderación de comentarios y/o eliminarlos.
Si quieres ponerte en contacto escríbeme a zsmmblog@gmail.com
SALUDOS, Xo.